El proceso de granallado es una técnica de tratamiento superficial por impacto con la que se puede conseguir un excelente grado de limpieza y un correcto acabado superficial en una amplia gama de piezas metálicas. Es el bombardeo de partículas abrasivas a alta velocidad (65-110 m /seg.) que, al impactar con la parte tratada, elimina los contaminantes de la superficie.
El granallado se utiliza para realizar procesos de:
Limpieza y eliminación de incrustaciones de fundiciones ferrosas y no ferrosas, piezas forjadas, desforre mecánico de alambres, alambres, barras, placas, planchas, limpieza y preparación de superficies de diversas partes donde se aplicarán posteriores recubrimientos (pintura, cauchos, etc.)
Este es el aspecto de un perfil estructural laminado en caliente antes de ser sometido al proceso de granallado, en el que se observan los restos del proceso de laminación y el óxido acumulado, que imposibilita una correcta adherencia de la protección anticorrosiva.
Esta imagen corresponde a un perfil ya granallado al que se le puede aplicar la una protección anticorrosiva con las garantías óptimas de adherencia tal y como indican los fabricantes de estos tratamientos.
Después para proteger los metales frente a la corrosión utilizamos una imprimación. ¿Cómo podemos saber qué tipo de imprimación nos conviene más? Existen diferentes factores que influyen directamente, como la zona en la que se encuentra, el clima, si va al exterior o al interior, si está cerca de la costa o alejado de ella, si se suele mojar, si está expuesto a algún ambiente industrial…
En esta imagen se observa el aspecto de un perfil laminado en caliente granallado e imprimado.
En Montajes Riber Top, contamos con 30 años de experiencia asesorando a cientos de clientes satisfechos con nuestros productos.

Para ampliar información u obtener un asesoramiento personalizado, pueden ponerse en contacto con nosotros. Les estaremos esperando.